Poco se habla de las patillas, y sin embargo, son una pieza fundamental en la imagen de cualquier hombre. Con ellas, hacemos referencia al vello que une el cabello con la barba, y que se sitúa en la parte delantera de nuestras orejas. Contribuyen a determinar nuestro estilo, y con ella, nuestra imagen, y suponen un auténtico quebradero de cabeza para muchos hombres a la hora de perfilarlas. A pesar de ser las grandes desconocidas, nos permiten hablar de diferentes tipos de patillas. Todos ellos aportan un estilo diferente, y pueden estar recomendados especialmente para diferentes formas faciales. Conocer que tipos de patillas nos favorecen puede mejorar nuestra imagen y permitir aprender a recortar nuestro tipo en concreto.
Las patillas. Esas grandes olvidadas
Para muchos hombres, son las grandes olvidadas. Suelen ser hombres que poseen barba, por lo que el perfilamiento de sus patillas no supone trabajo extra. Ahora bien, encontramos hombres que no poseen barba, pero si que le otorgan una especial importancia a sus patillas, y por ello, las lucen perfiladas. En este caso, si no tenemos la práctica suficiente, podemos tener verdaderos problemas para perfilarlas de manera adecuada y para que luzcan simétricas.
Los tipos de patillas
Si echamos un vistazo rápido a los tipos de patillas más habituales, encontraremos 4 tipos:
- Patillas largas, que llegan hasta la mandíbula. Nos permiten llenar nuestros extremos faciales de barba, pero no nuestra barbilla.
- Patillas por debajo de la oreja: Son un poco más cortas que las patillas que llegan hasta la mandíbula, pero recorren gran parte de los extremos de nuestra cara y también necesitan grandes cuidados.
- Patillas por la mitad de la oreja: Cada vez más cortas y desapercibidas, aunque esto dependerá de diferentes características, como el perfilamiento y forma que posean.
- Patillas por encima de la oreja: Son las más habituales si no lucimos barba, y también las más fáciles de trabajar.
Dentro de estos tipos generales, encontramos muy diversos matices y diferentes opciones, que nos van a permitir jugar con nuestro estilo y comprobar que imagen resulta más apropiada para nosotros.
Si atendemos a una clasificación más exhaustiva de las patillas, encontramos diferentes tipos en función de tres características básicas: Su anchura, su forma y su altura. Estas tres características, además, se pueden combinar, por lo que las posibilidades se multiplican dando como resultado cientos de estilos.
Tipos de patillas por su anchura
Patillas anchas o muy anchas
Este tipo de patillas se caracterizan por ocupar grandes espacios en los lados de nuestra cara. Son muy vistosas, por lo que solo los hombres más atrevidos pueden llevarlas. Para que luzcan arregladas, necesitamos delimitarlas de una manera harmoniosa y efectiva. Para ello, a su vez, necesitamos realizar un buen afeitado de nuestra barba.
Su imposibilidad para pasar desapercibidas hace que sean parte fundamental en la imagen de cualquier hombre que desee lucirlas, por lo que no supone una característica que nos haga pasar desapercibidos.
Patillas de ancho natural
Son aquellas delimitadas por el crecimiento natural del cabello, y no por nuestra voluntad. No obstante, para que luzcan arregladas y nos ofrezcan un plus de elegancia, deberemos prestarles la atención requerida.
Otorgan una imagen coloquial y amigable, y pueden pasar desapercibidas en combinación con otros elementos, como cabello semilargo o largo, o bien barba o perilla.
Patillas de ancho natural finas
A diferencia de las anteriores, estas patillas se caracterizan principalmente por su anchura fina. Estilizan el rostro de la persona, al mismo tiempo que le otorgan verticalidad. Por ello, son patillas ideales para todos aquellos hombres que deseen transmitir elegancia y perfeccionismo; pues, si hablamos de cuidados en lo que respecta a la anchura, son las que más cuidados requieren.
Tipos de patillas por la forma
Tan solo debemos provisionarnos con una buena navaja o cualquier otro utensilio para afeitar y delinear, para poder otorgarle diferentes formas a nuestra barba y lucir una imagen perfeccionista. Las opciones aquí son infinitas, pues podemos otorgarles tantas formas como nos permita nuestra imaginación. No obstante, encontramos algunas formas más habituales, y entre ellas, hacemos referencia a:
Patillas en forma rectangular
Son las más habituales, y las que menos trabajo implican. Estas patillas, de forma rectangular, ofrece un estilo clásico y elegante, que no sobresale de los estándares habituales.
Patilla de pico
Son bastante parecidas a las patillas rectangulares, no obstante, poseen una característica muy vistosa y definitoria: al menos uno de sus picos está alargado, hacia alguna dirección, haciendo de las patillas elementos muy vistosos.
Suelen ser llevadas por hombres que poseen una personalidad fuerte, y con cierto estilo rockero.
Patilla larga y fina
Se trata de esa patilla que llega por debajo de las orejas, y que se compone por una capa fina de pelo. Aporta singularidad al rostro, y puede encajar a la perfección con estilos más modernos o más clásicos. Es ideal para rostros muy estrechos.
Patillas ensanchadas
No son muy frecuentes, pero en diferentes épocas han estado de moda. Llaman mucho la atención, por lo que tan solo unos pocos se atreven con ellas. Necesitan recortarse de manera habitual, dada la gran superficie que ocupan.
Patillas con dibujo
¿Por qué no perfilar las patillas con diferentes formas y dibujos? Aquí, encontramos infinidad de opciones para realizar, aunque necesitaremos tener un verdadero control de la navaja y de nuestras habilidades artísticas para ello. Son muchas las formas que podemos crear, que pueden llegar a ser muy vistosas. Además, con ellas podemos transmitir diferentes estilos y mensajes a la sociedad.
Tipos de patillas por la altura
Por la mandíbula
Son patillas que se caracterizan por su largaria, y que finalizan su recorrido a la altura de nuestra barbilla. Aunque algunos hombres las lucen, no son las más habituales. Suelen lucirlas hombres con una gran personalidad y características desafiantes, y no suelen ser muy aceptadas en la sociedad.
Por la oreja
Un poco más cortas que las anteriores, aportan un toque de elegancia que resulta muy útil en personalidades clásicas. Son masculinas y, aunque son las más aceptadas, no pasan desapercibidas.
Por el lóbulo
Cada vez más cortas, las patillas que se sitúan por el lóbulo poseen características clásicas. Son muy aceptadas socialmente, pues encajan con las características faciales más normalizadas. Especialmente creadas para hombres que no les gusta destacar, pero quieren transmitir una imagen cuidada y elegante.
Muy cortas
Son las patillas que menos trabajo cuestan de mantener. Especialmente útiles en rostros redondos, pues potencia las formas faciales. Se adaptan perfectamente a casi cualquier tipo de peinados, especialmente a los clásicos. Suelen ser lucidas por figuras de poder.
Escoger el tipo de patilla que más represente nuestra imagen y nuestra personalidad es sinónimo de una mayor autoestima. Por ello, es importante determinar el conjunto de características externas que nos favorecen. Para ello, podemos experimentar en casa o bien confiar en los profesionales.
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